Aunque nos exponemos diariamente al sol, independientemente de la estación, las posibilidades de sufrir quemaduras solares (eritema) en verano se disparan. Con las vacaciones, la playa, el bronceado… ¡Que el sol no se te vaya de las manos!
¿Quieres saber cómo protegerte bien del sol? Para evitar quemaduras dolorosas y peligrosas, lo mejor es utilizar un producto con ingredientes que neutralicen los radicales libres y que ayuden a reparar el daño solar. Se recomienda el uso de fotoprotectores en crema siempre que vayamos a exponernos directamente al sol, pero también es una buena idea empezar a preparar unas semanas antes el organismo con suplementos orales, pero sobre todo ¡importantísimo! mantener unos hábitos saludables.
Cómo protegerte bien del sol
- Utiliza todos los días del año crema solar con un SPF alto y que incluya antioxidantes eficaces y activos reparadores
- Elige una crema que vaya desde la protección hasta la reparación. El daño solar no siempre se ve a simple vista
- Combina la crema de sol con cápsulas, es el modo más eficaz para activar la reparación. Aumentas tu resistencia al sol y evitas cocinarte
- Evita exponerte al sol del mediodía. Aunque tu piel sea oscura, tus células se fríen igual
- Aplícate cantidad suficiente de crema y reaplica cada dos horas o más a menudo si te bañas
- Utiliza gafas y gorro para no acabar como una “dorada al horno”
NO CAIGAS EN ESTO
«Si utilizo protección 50 no me pondré morena»
Siempre te bronceas. Lo correcto es ir cogiendo color de forma gradual y NUNCA quemarte.
«Si no hace sol no me quemaré»
Hay que tener cuidado con las nubes, ya que muchos rayos UV se filtran y pueden llegar a ser incluso más peligrosos.
«Si no me pongo protector solar me pondré morena más rápido»
Seguramente te quemarás y tendrás muchas más papeletas para sufrir manchas en la piel.
Voy a parecer un fantasma, y es pegajoso!
¡Que va! Existen formulas súper ligeras, brumas que no son pegajosas ¡y nada de parecer casper! Además los pulverizadores tipo spray nos facilitan mucho la aplicación.
Me aplico una buena capa y listo!
De nada sirve que apliques una capa gruesa si no vuelves a reaplicar. Hay que estar pendiente cada 2 horas. Si nos metemos en el agua y después nos secamos con la toalla se elimina practicamente el 80% aunque sea waterresistant o waterproof.
Conoce más mitos sobre la protección solar en este artículo.
IMPRESCINDIBLES PARA PROTEGERTE DEL SOL
Arkosol Intensivo: Complemento alimenticio a base de carotenoides 100% de origen vegetal, plantas, vitaminas y minerales. Ayuda a preparar la piel frente al estrés oxidativo y contribuye a la pigmentación normal de la piel.
Heliocare 360º: Protector solar con textura ultraligera, libre de aceites y tacto seco. No comedogénico, especialmente indicado para pieles grasas y acnéicas por su acción seborreguladora y matificante que absorbe la grasa.
Protextrem Bronze Aceite Seco SPF30: Potenciador del bronceado, protege al tiempo que estimula el bronceado y la producción de melanina, para conseguir un bronceado más intenso.
Según María Vitale, dermatóloga y directora Médica de Cantabria Labs “Hay que desterrar que el bronceado sea algo saludable. Porque no es más que el resultado del daño solar producido en la dermis. Hay que tener más precaución en este sentido” así que ya sabes, este verano ¡No te frías al sol!